EXPOSICIÓN TEMPORAL

Nacimiento, Miradas en el Tiempo

Una experiencia que une tradición, arte popular y mirada contemporánea

Figuras en arcilla policromada: Felipe Nieva (México)
Instalación sonora: Francisco Eme
Curaduría y museografía: MAPI – AMMA A.C.

Una propuesta que reúne más de 1.100 figuras de arcilla policromada creadas por el artesano mexicano Felipe Nieva, capaces de desplegar un universo narrativo que abarca cerca de 50 pasajes bíblicos. Desde el Paraíso y los relatos del Antiguo Testamento hasta el nacimiento de Jesús, cada escena está construida con un lenguaje figurativo-expresionista vibrante, dinámico y profundamente humano.

Las piezas se articulan en un recorrido museográfico contemporáneo que favorece tanto la contemplación detallada como la lectura narrativa de cada episodio. Colores intensos, gestos amplificados y composiciones cargadas de expresividad convierten a estas obras en testimonios vivos de la tradición del arte sacro popular.

La instalación se completa con una obra sonora de Francisco Eme, que dialoga con las vitrinas y acompaña al visitante en una experiencia sensorial envolvente. Imagen y sonido se entrelazan para proponer una lectura renovada de historias que forman parte del imaginario colectivo de diversas culturas.

Una mirada contemporánea a la tradición

“Nacimiento, Miradas en el Tiempo” integra artesanía, arte sacro y creación contemporánea, invitando a recorrer episodios centrales del imaginario bíblico desde una sensibilidad actual. La muestra:

Valora el trabajo artesanal y la tradición popular como patrimonio cultural.

Promueve el acceso democrático a la cultura, al presentarse en un espacio público con entrada gratuita.

Invita a reflexionar sobre las narrativas del Antiguo y Nuevo Testamento desde una perspectiva estética contemporánea.

Genera un diálogo entre fe, arte y patrimonio, apelando a públicos diversos.

Impacto e instalación

El montaje en el MAPI propone un recorrido inmersivo en el que las piezas dialogan con la arquitectura del museo. Las vitrinas, iluminación y disposición narrativa invitan a un tránsito pausado, donde cada figura revela su fuerza simbólica y emocional. La obra sonora potencia esta lectura y amplifica la dimensión sensorial de la experiencia.

La exposición se consolida así como un referente cultural, tanto por su escala como por su capacidad de conectar tradición, memoria y creación en una misma propuesta.